En el Museo Naval de Madrid, sito en el Paseo del Prado nº 5, 28014 Madrid, alberga una gran colección de instrumentos científicos, náuticos, cartografías, maquetas, relojes de sol etc. Entre estas piezas se encuentran los relojes de sol de varios tipos.



Anillo astronómico (c. 1575)
Fue ideado por Gemma Frisius y atribuido a A. Zeelst. Esta formado por 3 anillos circulares de latón dorado (meridiano, ecuatorial y horario), unidos dos a dos por unos ejes. Puede funcionar como reloj de sol, como reloj de noche y como instrumento de orientación. También se puede conocer las horas del orto y ocaso.

Anillo equinoccial universal
Se encuentra en la esquina superior derecha de la foto. Es de latón dorado y está formado por dos anillos, uno exterior fijo, otro interior móvil y una escala diametral. También tiene una argolla que se desliza por el exterior. Tiene un diámetro exterior de 154 mm. El anillo exterior sirve como meridiano del lugar (dirección norte-sur) cuando se va a leer la hora.

Compendium astronómico
Un compedium astronómico es un conjunto de instrumentos metidos en un estuche. Entre éstos instrumentos se encuentran relojes de sol, calendarios, nocturlabios, brújula, cuadrante de alturas y reloj de Luna, entre otros. Es de latón dorado y madera y mide 08,5 x 95 x 30 mm y el estuche es una cajita de madera con dos tapas. Consta de un nocturlabio, reloj de Luna, reloj equinoccial, brújula, reloj de sol azimutal magnético y cuadrante de altura.


Compedio astronómico de Felipe II
Estuche de bronce dorado de 118 x 118 x 36 mm, fabricado por Tobías Volckhmer, cosmógrafo del duque de Baviera, en 1596. Fue fabricado para el rey Felipe II. El centro del estuche tiene una brújula, y en las tapas se encuentran los relojes, además de otras informaciones geográficas o gnomónicas. En la tapa superior del estuche hay un reloj de sol horizontal con gnomon triangular que se abate hacia un lado cuando el estuche está cerrado. También puede ser usado como reloj vertical dependiendo de cómo se oriente. En la tapa inferior tiene un astrolabio plano y un cuadrante de alturas.

Cuadrante solar equinoccial
Posiblemente del siglo XVII. Está firmado por Franciscus Schmartz fex Bruselle. Fue una donación de la Asociación Amigos del Museo Naval.


Relojes de sol ecuatoriales
Son estuches de latón dorado. Sus medidas son: 52 x 50 x 14 mm (reloj izquierda) y 44 x43 x 13 mm . Están formados por una tapa, la base y el anillo ecuatorial. En la base lleva una brújula. El anillo ecuatorial está inscrito en un cuadrado. El anillo tiene una bisagra que lo mantiene en la posición correcta al levantarlo de su posición horizontal que muestra la foto.

Reloj de sol en cruz
Es en realidad una cajita de latón dorado en forma de cruz. La longitud de la caja es de 59,5 mm. En los laterales de la caja aparecen las líneas horarias y en la tapa tiene una escala de latitudes. El reloj hace las veces de un reloj ecuatorial y sirve, en este caso concreto, para la lectura de la hora, altura del sol, y del signo del zodíaco. También sirve para la lectura de la umbra versa, que es la sombra que da un ortoestilo sobre una pared, y la razón entre la longitud de la sombra y la longitud del ortoestilo que la genera.

Nocturlabio
Un nocturlabio o cuadrante solar equinoccial es un instrumento utilizado para determinar el tiempo en función de la posición de una determinada estrella en el cielo nocturno. También se conoce como nocturnum Horologium (instrumento de tiempo para la noche) o nocturlabio . El que está en el museo es de origen inglés, hacia 1650. Está hecho en bronce y madera de boj de 4 mm de espesor y tiene 103 mm de diámetro. Está formado por un disco exterior fijo, regla o alidada, disco interior móvil y ocular . La regla tiene una longitud de 200 mm. Sirve para: calcular la hora solar por la noche, encontrar la latitud de un lugar, conocer la hora de paso de la Luna por el meridiano y calcular las mareas.

Reloj de sol de cañón
Es de bronce y está encima de una base circular de mármol. Está formado por la base de mármol que es la que lleva el reloj de sol, el cañón y la lente junto a sus soportes. La base tiene un diámetro de 245 mm y lleva el reloj solar y su gnomon. Las líneas horarias marcadas van de las 6 a 6 con numeración arábiga, aunque tiene más líneas pero sin marcar las horas. También marca las de las medias. En el momento del mediodía la lupa concentraba los rayos solares justamente en el oído del cañón, produciéndose la detonación de la pólvora y anunciando el mediodía local verdadero de aquel punto. La lupa es abatible para ajustarla a la declinación solar a lo largo del año.

Cuadrante solar ecuatorial
Debido a su diseño también se les conoce como relojes de Augsburg. En el centro tienen una brújula y son de finales del siglo XVIII. El de la derecha es atribuido a IGV , Iohann Georg Vogler, hijo de orfebres de Augsburgo. Están formados por una base, limbo, escala horaria y perpendículo. La escala horaria tiene grabadas las horas en números romanos. Fueron donados por la Asociación Amigos del Museo Naval.

Reloj de sol de columna (s. XVII) y anillo solar (s. XVIII)
El primero también se llama reloj de pastor. Es una columna de madera de 132 mm de alto y 45 mm de diámetro. El reloj está dibujado sobre un papel pegado a esta columna. El anillo de altura tiene 55 mm de diámetro y es de latón. Tiene un colgante para suspenderlo en vertical. Ambos son donaciones de la Asociación de Amigos del Museo Naval.

Reloj de sol horizontal, reproducción brújula modelo Si Nan y reloj de sol horizontal sobre brújula
Es una cajita plateada con forma octogonal y marcada en la vitrina con el nº 7. Contiene un reloj solar horizontal con base de 78 x 65 mm de longitud y una brújula. El gnomon es triangular. El nº 15 de la vitrina es una brújula donada por el Ministerio de Cultura de China en 1997.
El nº 16 corresponde a un reloj horizontal de latón y madera. La base es cuadrada de 70 mm de lado y contiene a la brújula que lleva dibujada una rosa de los vientos.

Reloj de sol horizontal, reloj de sol flotante y reloj ecuatorial
El primero es el nº 7 de la vitrina. La base es octogonal, de latón, y de 68 x 62 mm de longitud. Es del siglo XVIII y está firmado por Butterfield.
El segundo corresponde al nº 10 de la vitrina. Se encuentra dentro de una caja de madera circular con tapadera. Es del siglo XVIII y fue construido por David Beringer. Es una donación del Ayuntamiento de Melgar de Fernamental, en Burgos, en 1947. En la parte superior derecha hay otro reloj horizontal de este tipo.
El tercero se encuentra a la derecha del primero y es de latón dorado. Es un reloj de los llamados de Ausburgo de finales del siglo XVIII y su base es octogonal. También lleva una brújula con una rosa de los vientos.

Reloj de sol horizontal autorientable
Es de latón dorado y está formado por una base, gnomon, perpendículo (brazo articulado) y circulo giratorio. Es de 1829 y fue ideado por el marqués de Feria y construido por Pedro Ballesteros en Madrid. Sirve para calcular la declinación de una pared, calcular la meridiana y como reloj de sol autorientable. Corresponde al reloj nº 6 de la vitrina de la foto.

Reloj de sol ecuatorial portátil
Se encuentra en una caja de madera, siendo el reloj de latón. Corresponde al nº 9 de la vitrina. Está formado por la base, anillo ecuatorial y limbo. La base tiene un diámetro de 100 mm, y en él se aloja una brújula El anillo tiene en su borde una flecha indicadora que sirve de índice sobre el limbo.

Reloj de sol cúbico
Es de madera y latón. La madera está decorada con papel. Está formado por 3 partes: Base, columna y cubo. La base es de 100 x 78 x 13 mm y está decorada con flores., incorporando una brújula con la rosa de los vientos. Fue construido por David Beringer a finales del XVIII. Corresponde al reloj nº 5 de la foto. El cubo tiene relojes en sus cinco caras: cara norte, cara sur, cara este, cara oeste y cara superior, donde hay un reloj horizontal.

Reloj de sol de faltriquera
Son de madera cubiertas con papel. Son relojes dípticos que llevan una brújula en su base. El gnomon es un hilo que une sus dos caras.


Fotos del 27 de febrero del 2015
Fuente: Relojes de sol de Madrid de Jacinto del Buey Pérez y Javier Martín-Artajo